José Colmenárez
El Arzobispo de Quito, Mons. Alfredo José Espinoza Mateus, sdb, presidió este 1° de marzo, una Celebración Eucarística en la Iglesia de El Sagrario, con más de 90 personas que integran la Fase Continental del Sínodo de la Sinodalidad en los países bolivarianos, entre ellos, Colombia, Perú, Bolivia, Venezuela y Ecuador.
Esta asamblea es un motivo de esperanza y anhelos, porque recoge la voz de todos los actores de la Iglesia, y con esto, el deseo de seguir creando espacios de encuentro y caminos de comunión.
Ante esto, Mons. Alfredo Espinoza, invitó a los fieles a no perder la vista que “somos pueblo de Dios” que está en camino sinodal.
«El Camino Sinodal, que venimos recorriendo juntos como Iglesia durante estos años, es el mayor signo que debemos saber descubrir hoy y ahora, no se nos dará otro signo, es el Signo de Dios para nuestro tiempo, para nuestra Iglesia, es la “mayor sorpresa de Dios"», explicó.
En lo que refiere a la novedad y sorpresas de Dios, Mons. Espinoza destacó que buscar nuevos caminos significa “escuchar al Señor”, especialmente en los más pobres, al igual que en los laicos, los jóvenes, los hermanos indígenas, afrodescendientes y las culturas minoritarias “quienes son los que mejor entienden el sueño de Dios”.
“Todos ellos nos ayudan a mirar nuestra realidad con una mirada de amor y a vivir el evangelio encarnado en múltiples y distintas culturas (…) debemos ser esa Iglesia de la escucha y una Iglesia que sueña un nuevo camino. Recordemos que los caminos se hacen al andar con fe, esperanza, valentía, compromiso y decisión”, agregó.
Por su parte, Mons. Miguel Cabrejos, ofm, Obispo de la Arquidiócesis de Trujillo (Perú) y Presidente del Celam, agradeció a Mons. Alfredo Espinoza, al igual que a la directiva de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana por la acogida, y por el compromiso de seguir caminando juntos como Iglesia en este proceso de la fase continental del Sínodo.