Cáritas Quito entregó 96 sillas de ruedas y otras ayudas técnicas a personas de bajos recursos
José Colmenárez
Como parte de su trabajo por la promoción y el respeto de la dignidad humana y la igualdad social, la Arquidiócesis de Quito a través de su brazo social, Cáritas, ha comprometido su esfuerzo en la recepción y entrega de 96 sillas de ruedas y otras ayudas técnicas a personas de bajos recursos y con algún tipo de discapacidad física.
La actividad se llevó a cabo en la Parroquia Santísima Trinidad el pasado 22 de julio y contó con la presencia del Arzobispo de Quito, Mons. Alfredo Espinoza, sdb; del Director de Cáritas Quito, P. Jorge Vásquez; del Ingeniero Eduardo Romero Carbo, representante de la Junta Beneficencia de Guayaquil; del P. Juan Carlos Garzón, párroco de la Parroquia Santísima Trinidad y Vicario Episcopal de la Vicaría Santa Mariana de Jesús y de la Msc. Cristina Santillán, Ecónoma de la Arquidiócesis de Quito.
Esta significativa donación se logró gracias a la ayuda y el aporte de la Junta de Beneficencia de Guayaquil, quienes se dedican a mejorar la calidad de vida de aquellos que menos tienen, y que para el Ingeniero Eduardo Romero Carbo, representa una oportunidad para que las personas que padecen alguna dificultad física puedan mejorar su movilidad y fortalecer así la integración social de los adultos mayores y personas más vulnerables.
Por su parte, el P. Jorge Vásquez agradeció a los “héroes silenciosos” que han contribuido para que esta donación se haga realidad. Añadió que la entrega de estas ayudas técnicas se realizó luego de un intenso trabajo de identificación y selección de las personas más necesitadas en la Arquidiócesis de Quito.
“Gracias a todos porque el día de hoy nos han permitido vivir lo que el Papa Francisco nos pide, 'llevar la caricia de Dios'. Hoy ustedes nos han dejado acariciar la ternura, mediante todos estos esfuerzos”, agregó el P. Jorge Vásquez.
Mientras tanto, Mons. Alfredo Espinoza durante su intervención destacó que este tipo de acciones hacen que su corazón se conmueva y le permite mirar y escuchar las realidades de las personas más vulnerables y necesitadas.
“El Papa nos dice que hay que aprender a mirar y escuchar como lo hacía Jesús; y Jesús miraba con el corazón. Si miramos con el corazón también lo hacemos con misericordia”, concluyó Mons. Espinoza.
En esta oportunidad fueron entregadas 96 sillas de ruedas, 14 andadores, 45 bastones y 4 pares de muletas. Se espera que en los próximos días se continúen haciendo más entregas en otras parroquias de la Arquidiócesis de Quito.
